Ayer la excusa fue la "amenaza comunista" que erguía perversamente su hoz y martillo sobre el águila y la serpiente; hoy parece ser que lo será el conjunto de bandas criminales sin escrúpulos que están tapizando con ejecutados al nopal.La militarización de un país, de un estado o de una ciudad es algo triste y sumamente peligroso, preocupante. Los tanques, los soldados, en tiempos de paz, deben estar en sus cuarteles.Varias atroces dictaduras han comenzado cuando los ejércitos hacen suyas las calles...
La " malévola conjura comunista" era aniquilada, terminada...Algunos de los "peligros para México" de ese entonces eran por fin detenidos, golpeados, insultados, humillados, encarcelados, heridos, desaparecidos o asesinados (aunque se argumente todo lo contrario); claro, "como se lo merecían", claro, como "La Patria lo requería"...¿Qué se pensaron? Bien ganado se lo tuvieron por estar jugando a los Ché, los Castro, los Mao Tse Tung y demás referentes "izquierdosos" (encomiables o no), versíón mexicana. ¿Cómo se atrevieron a jugar a la utopía en un país con tan amplia y gustosa psique distópica?
Y ahí está ensangrentado, golpeado, semidesnudo, "posando" el famoso Florencio "El Pelón" López Osuna (segundo de izquierda a derecha de la segunda fila de fotos)...Él y otros de sus compañeros que ahí aparecen tal vez son uno de los mejores símbolos de esa generación del 68:
Una generación, una juventud despertada de sus sueños a punta de golpes, con bayonetas, macanas, rifles, tanques...una generación marcada intensamente por la sangre; una generación que pidió, exigió apertura, diálogo, cambios, recibiendo como respuestas a ello cerrazón, monólogos, "autismos de gorilas" y violencia del status quo; una generación cuyos varios de sus miembros vieron truncadas o dañadas seriamente sus vidas; una generación que quiso generar (cambios)y obtuvo sufrir la degeneración del régimen.
* Fotos publicadas en la Revista Proceso edición especial 11 (Octubre de 2002); pags. 13, XII y 54
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